Cementerio

CEMENTERIO


Tenemos una amplia gama para que usted encuentre lo que está buscando, como sepulturas, nichos, inscripciones, cristos, etc … aquí podrá encontrar parte de nuestros servicios.
Disponemos de servicio de colocación y montaje para todo tipo de trabajos para Cementerio en mármoles y granitos.
El buen gusto y la calidad exigibles en estos productos, preside nuestra forma de trabajar en ornamentación de elementos funerarios ya sea lápidas para nichos, fachadas e interiores de panteones, placas de recuerdos fúnebres y un largo etc. de trabajos adaptados a cada caso particular.

 CATÁLOGOS

 

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A los muertos no sólo se les recuerda en el Día de Todos los Santos. Para que las tumbas de tus seres queridos luzcan bonitas en esta fecha debes limpiarlas entre tres y cuatro veces al año. Los productos a usar varían dependiendo del material. El granito sin pulir se limpia bien con un detergente de base ácida. El mármol con un jabón neutro. Para las lápidas y nichos viejos y desgastados hace falta un detergente convencional y un poco de paciencia.

1.       Detergente convencional para las tumbas más antiguas.

Las lápidas y nichos antiguos y mal conservados son los más difíciles de limpiar. “Se acumula mucho moho y suciedad”, comenta Juan Pedro Mellinas, fundador de la empresa de limpieza de tumbas Eternalia.“Lo mejor es usar un detergente convencional y frotar con mucha paciencia”.
Mellinas explica que las pistolas de agua a presión también pueden resultar útiles para limpiar este tipo de tumbas. “El problema es que encontrar una toma de agua y de electricidad en un cementerio puede ser complicado”. Para estos casos el empresario recomienda usar un limpiador con batería propia.

2.       Tumbas de granito.

El proceso de limpieza de una sepultura de granito varía dependiendo de la calidad del material. Si la lápida o nicho está hecha de granito pulido puedes usar un detergente de pH neutro, como por ejemplo ‘Don Limpio’. Humedece un paño y frota la superficie con él. Si el granito está sin pulir, usa un jabón con una base ácida. Puedes comprarlo en cualquier supermercado.

3.       Tumbas de mármol.

El mármol es un material delicado. Para limpiar una tumba hecha de este material lo mejor es un jabón de pH neutro. Moja un paño en agua y frota la lápida o nicho con suavidad hasta que la suciedad se disipe.
No uses lejía. A primera vista puede parecer que este producto limpia muy bien, ya que deja las superficies muy blancas. Pero en realidad corroe, y esto a la larga puede provocar destrozos irreparables.

4.       Placas e inscripciones de metal.

Muchas tumbas cuentan con pequeñas placas de metal con mensajes dedicados a los familiares fallecidos. Limpiarlas es bastante fácil. Con usar un jabón de cocina convencional bastará. También puedes usar vinagre, pero en este caso aísla la superficie de debajo con un poco de cinta adhesiva. Este líquido es muy ácido y puede dañar la lápida o nicho, sobre todo si el material usado es el mármol.

5.       Los panteones: las sepulturas más fáciles de limpiar.

Las tumbas de los panteones, al estar resguardadas del exterior, se ensucian y desgastan muy poco. Pero no te confíes. Acude con regularidad al cementerio y comprueba que la puerta del panteón está en buen estado. Si hiciera falta limpiar las lápidas o los nichos, sigue las recomendaciones de este practicograma.

6.       Limpia las tumbas entre tres y cuatro veces al año.

Para mantener una tumba en buen estado lo mejor es limpiarla con regularidad. “Hay que hacerlo por lo menos una vez al año”, aclara Juan Pedro Mellinas, “aunque lo ideal es hacerlo entre tres y cuatro veces”. No hace falta aplicar ningún producto aislante. Con seguir las medidas de higiene que explicamos en este practicograma basta.

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